¿Sabías que pequeñas ineficiencias diarias pueden generar grandes pérdidas al final del mes?

Detectar y eliminar estas fugas de dinero es clave para una operación de flotas rentable. Aquí tienes las áreas más comunes a revisar:

1. Consumo de combustible: Verifica el uso excesivo de combustible por rutas ineficientes o malas prácticas de conducción.
2. Mantenimiento reactivo: Realizar reparaciones solo cuando hay fallas puede salir más caro que implementar un plan de mantenimiento preventivo.
3. Tiempos muertos: Analiza el tiempo que los vehículos están sin uso o detenidos para optimizar horarios y rutas.
4. Mal uso de los vehículos: Controla la telemática para identificar comportamientos inadecuados como frenadas bruscas o aceleraciones innecesarias.
5. Fallas en la planificación: Evita recorridos duplicados o vacíos con un software de gestión que consolide tareas.

Implementá un sistema de gestión predictiva para monitorear la salud de tus vehículos y tomar decisiones antes de que surjan problemas.

Conocé cómo RDSCube te ayuda a ahorrar en cada kilómetro recorrido.